El atletismo es un deporte con mucha aceptación en nuestro país y que realizan personas de todos los públicos y todas las edades. Cada vez hay más deportistas que se inician a la práctica del running. Mientras, saber cómo correr una maratón ya requiere un plus de experiencia y resistencia física y mental que hay que entrenar.

Este reto se hace mucho más intenso y emocionante si eres invidente y necesitas un corredor guía para ciegos para poder participar y culminar los 42.195 metros que componen esta prueba.

Nuestro compañero Juan Montilla se preparó muy mucho para correr la Maratón de Barcelona del pasado 11 de marzo en Barcelona, y que le valió para repetir hazana un año después en Sevilla. 2019 Experiencia no le faltaba porque tenía a sus espaldas 2 maratones terminadas: Madrid 2012 y París 2013, más un Triatlón Olímpico en la Casa Campo de Madrid en junio de 2014.

Repetir esta hazaña 4 años después pero en diferente suelo y con distintas condiciones climatológicas implicaba volver a entrenar con fuerza meses antes y practicar la coordinación con su guía de ciego. Y es que esta figura es imprescindible y obligatoria para poder competir en las pruebas oficiales de una maratón si eres invidente.

 

Plan de entrenamiento para correr una maratón siendo ciego

 

corredor guia para ciegos

 

Además de correr mucho y de manera gradual para ganar resistencia, básicamente hay que hacer algo que para los corredores con discapacidad visual es esencial: probar los distintos firmes para entrenar la propiocepción y el equilibrio de tobillos, que en el ciego siempre pueden estar mucho más débiles y poco reforzados.

Por tanto, lo que hace Juan con su guía es dificultar los entrenamientos con diferentes tipos de suelo. Corren en asfalto, hierba, arena embarrada o tramos con recorrido abrupto. Así, los 42 kilómetros de la maratón se harán con mayor alegría y menor sufrimiento físico.

Los entrenamientos técnicos los realizan por separado entre semana. Juan, como ciego, entrena en cinta toda la subida de cuestas y la velocidad con series de 20 o 30 minutos para conseguir la fuerza y la potencia necesarias para una resistencia de tal distancia.

Luego, los sábados y domingos ya hacen tiradas largas, de manera conjunta, a partir de los 20 kms  hasta los 33. El objetivo es ganar confianza en los cambios de firme y que el corredor ciego esté bien enseñado a asimilar estos cambios, ya que al no ver el cuerpo no se fía.

Para ello, el atleta invidente y su guía deben aprender a coordinarse de forma muy eficaz. La inseguridad puede provocar una caída o torcedura que podría romper todas las expectativas de la maratón. Esta complementación es básica para otros deportes para ciegos, como puede ser montar en bicicleta.

 

Cómo es la coordinación con el corredor guía para ciegos durante la carrera

 

Ambos runners, ciego y guía, corren unidos mediante una cuerda colocada en sus manos, y que por norma no debe ser de más de 50 centímetros. Durante más de dos horas va a estar juntos, muy cerca, en un espacio que se denomina «de confianza».

Por tanto correr una maratón con un guía para ciegos requiere de mucha coordinación. Entre ambos atletas tiene que existir una total comunicación y complicidad para medir bien el ritmo del trote con los brazos y las piernas a la vez que cambian de dirección o de velocidad.

Y esto nuestro compañero Juan y su guía Juan Carlos lo tienen más que entrenado.

Lo que hace Juan Carlos como guía es estar muy atento y alerta a los cambios del terreno y, sobre todo, a la hora de adelantar o dejar pasar a otros corredores, ya que son dos personas que ocupan el ancho de la carretera y la maniobra es mucho más compleja.

Luego existen unas señales especiales, ya sean de voz o corporales, para ir superando con antelación cualquier incidencia que pueda surgir y, así, conseguir el objetivo: ¡terminar una nueva maratón!.

Paralelo a este entrenamiento en el terreno de juego hay otro entreno importante en camilla, y que hacemos en nuestro centro de osteopatía y fisoterapia ubicado en MóstolesCon técnicas de masaje manual ayudamos a revitalizar la circulación de las piernas y eliminar la fatiga tras el esfuerzo.

 

La experiencia de correr una maratón: Barcelona 2018

 

Una vez regresado de la ciudad Condal y antes de ponerse en las manos de sus compañeros, Juan nos contó como fue la experiencia de correr con su corredor guía para ciegos y completar su tercera maratón.

Aquí va su historia:

“Ha sido una de las experiencias de los últimos tiempos más divertida para mí y para las personas con las que compartí carrera.

Mi guía, Juan Carlos, fue crucial en su función, y no me cansaré de repetirlo. La labor que hace un corredor guía para ciegos cuando nos acompañan a los atletas invidentes, es tan importante, que sin ellos jamás podríamos llevar a cabo hazañas como esta.

Como no sabía cómo iban a estar las fuerzas, estuve algo expectante en los 3 primeros kms. Como había dificultado mi entrenamiento y la preparación para facilitar el día de la prueba me encontré mucho más fuerte que nunca.

Así que hasta el kilómetro 34, corríamos con un promedio inferior de 3 horas y media para el total de los 42 kms.

Arriesgué porque me mereció la alegría y justo en ese km. 34 las piernas me dijeron que ya no podían más.

Cualquier empujón o desequilibrio suponía un gran dolor en las mismas, por lo que  decidimos andar lo que pudiéramos hasta recuperar con geles y sales y continuar a un ritmo pausado hasta la meta.

Aquí, Juan Carlos, mi guía de ciego, jugó un papel crucial animándome y jaleándome en cada momento ya que tuvimos que caminar durante un kilómetro y medio.

De hecho él comentó que le sorprendió y le impresionó muchísimo el hecho de que no parase en ningún momento a pesar de que era doloroso hasta caminar durante 1500 metros.

Pero lo cierto es que si no llega a ser por él  no hubiera podido pasar de ese km. 34, ya que la marcha normal se volvió muy complicada y dolorosa.

Al pasar el dolor del cuerpo sobre pasamos la meta con una gran sonrisa y alegría y muy empujados por el público e incluso por todos los corredores que sobre pasábamos o nos sobre pasaban.

Ha sido todo un éxito aunque nos quedáramos en las 4 horas y media en las que terminamos, pero es una experiencia única correr una maratón”.

 

como correr una maraton

 

Cómo prepararse para una maratón llana como la de Sevilla -2019-

Juan suma y sigue, y un año después, en febrero de 2019, consumó su cuarta maratón con su guía para ciegos. Te dejamos con las sensaciones de nuestro director de AFIDAS:

«La importancia de Juan Carlos ha  sido crucial para llevarme y conducirme a la maratón de Sevilla que la veía un tanto lejana por eso de por el hecho de ser tan llana.

El cambio de terreno hace que las piernas estén en un registro distinto y que no se haga monótono el trayecto. Pero el hecho de que la carrera sea tan plana implica que todo el impacto siempre vaya al mismo sitio sin que tenga descanso. Esta circunstancia, aunque parezca que lo haga mucho más fácil, es toda una complicación.

En la pasada maratón de Sevilla, a partir del kilómetro 28 y hasta el 38, tuve roturas de fibras y micro roturas, en la musculatura larga de la pierna, en los cuadriceps, en los isquiotibiales y en los gemelos. Por lo que me han tenido que atender en nuestro centro AFIDAS para reparar el daño tisular y de la fibra muscular.

Aunque me pesan las piernas, después de que me han masajeado y estirado mis compañeros, ya camino con más soltura que el día anterior cuando terminé la prueba. Ahora los dolores son mucho más llevaderos y con la sensación de recuperar.

Aunque la organización de la maratón sevillana ha sido nefasta, toda la animación y los compañeros de carrera estuvieron geniales a la hora de animarnos. Nos llevaron vado hacia delante siempre.

Además, tuve el privilegio de correr al lado del ahora lesionado Fermín cacho, que hizo 20 km de los 42. Para mí fue un gran honor correr junto a una persona que fue Medalla Olímpica y que admiro».

Maraton de sevilla

 

Cómo recuperarse de una maratón

Tras el gran esfuerzo de correr una maratón,  viene la recuperación, también muy importante.

Las técnicas de masaje y relajación tienen que ir dirigidas a evacuar y asimilar roturas y microoroturas musculares. Por ello, los estiramientos son muy apropiados.

Aunque los auto-estiramientos son efectivos y necesarios, lo son mucho más si son asistidos y dirigidos por fisioterapeutas especializados.

Lo normal tras la prueba es que los movimientos que hace el corredor sean más lentos y, en el caso de Juan, con la tensión por el dolor, le hacen compensar mucho de tal forma que le impiden lograr la tensión precisa en las zonas más afectadas a nivel muscular.

Por tanto, es importante que estas maniobras sepan interpretar perfectamente la tensión necesaria y la presión adecuada a la hora de masajear para evitar males mayores.

 

¿Tú también quieres prepararte para correr una maratón?

 

FISIOTERAPIA DEPORTIVA AFIDAS

 

Si quieres saber cómo es el trabajo de un invidente en otros deportes, te invitamos a leer la experiencia de Juan como atleta paralímpico en judo para ciegos.